
CONJUROS DE AMOR
Unté con grasa el cráneo de mi padre,
el espíritu rojo mira,
el espíritu blanco jadea,
el espíritu negro calla.
Te espero por las noches.
Embadurné con pintura el cráneo de mi madre,
el espíritu rojo ronda,
el espíritu blanco está inmóvil,
el espíritu negro calla.
Esta noche vendrás a mí
vivo
o muerto.
ARDEREMOS
Callo como la electricidad.
Callás como la electricidad.
Arderemos
en la silla eléctrica
del amor.
CEPILLO DE ACERO
Hoy no vengas a verme.
Si entreabriera la puerta,
no reconocerías mi cara.
Porque hoy estoy de refacción completa,
de balance anual,
de gran lavado.
Ensayo general de fin del mundo
en un microcosmos.
Con cepillo de acero
friego el cuerpo hasta el hueso.
Saqué la piel, está colgada aquí al lado,
las entrañas desnudas humean,
vibran las costillas desnudas,
y llega el juicio,
el altísimo alto tribunal
viene a juzgar con paso vivo.
Todas las sentencias son:
culpable.
Juzga el cerebro y los ojos extraídos de
la calavera,
a la pecadora desnudez de la pelvis
y a los dientes sin encías,
a los pulmones impuros, a las perezosas
tibias.
Oh, sí, me esfuerzo mucho,
con cepillo de acero
friego el cuerpo hasta los huesos,
los huesos hasta la médula.
Quiero estar más limpia que un hueso.
Quiero estar limpia
como la nada.
Juzgo, ejecuto las sentencias,
tirito de espanto,
la rea y el verdugo atareado.
Hago balance, transpiro
sudor de sangre.
Entonces, hoy no vengas a verme.
No compres flores. No tires la guita.
Ella tiró las llaves a las ruinas
Al morral de la espalda
metió los últimos mendrugos,
por última vez
cerró la puerta con llave.
Levantó con esfuerzo
al niño, al otro
lo tomó de la mano.
Por última vez
bajaba por esa escalera.
Tiró la llave
a las ruinas.
CONSTRUYENDO UNA BARRICADA
Teníamos miedo construyendo
una barricada
bajo las balas.
El tipo de la fonda, la amante del joyero,
el peluquero,
todos unos cobardes.
Cayó en tierra la mucama
trayendo adoquines de la calle,
teníamos mucho miedo,
todos unos cobardes,
el portero, la feriante, el jubilado.
Cayó en tierra el farmacéutico,
arrastrando una puerta de retrete,
teníamos más miedo aún, la
contrabandista,
la modista, el tranviario,
todos unos cobardes.
Cayó el pibe del reformatorio,
acarreando una bolsa de arena,
entonces tuvimos miedo
de verdad.
Aunque nadie nos obligaba,
construimos una barricada
bajo las balas.
DOS PAPAS
Llevaba dos papas
se me acercó una mujer.
Quería comprar dos papas
tenía hijos.
No le di las dos papas
escondí las dos papas.
Tuve madre.
MI HIJA
Construí una casa,
elegí a un hombre,
hago mi trabajo.
Luego me iré y vendrá mi hija.
Construirá una casa,
elegirá a un hombre,
hará su trabajo.
Luego se irá.
Pariéndola, la condené.
FELICIDAD
Mis cabellos son felices
y la piel es feliz.
La piel tiembla de felicidad.
Respiro felicidad en vez de aire
lenta y profundamente,
como el humano que esquivó
un peligro mortal.
Por el rostro caen lágrimas,
yo no me entero.
Olvidé que todavía tengo rostro.
Mi piel canta,
tirita.
Siento el tiempo durando
como se lo siente en la hora de la muerte.
Como si sólo con el sentido del tiempo
atrapara el mundo,
como si la existencia fuera sólo tiempo.
Sumergida en su magnificencia
conmocionante
siento cada segundo de felicidad, cómo
se acerca
se repleta, florece
según su natural manera,
moroso como el fruto,
pasmoso como la deidad.
Ahora
comienzo a gritar.
Grito. Abandono el cuerpo.
No sé si todavía soy humana,
Quién puede saberlo gritando de felicidad.
Pero por un grito así se muere,
entonces, muero de felicidad.
Parece que ya no hay lágrimas
sobre el rostro,
parece que la piel ya no canta.
No sé si todavía tengo piel,
mi piel está demasiado lejos
de mí para saberlo.
Ya me voy.
Ya no tirito,
ya no respiro.
No sé si todavía
tengo algo con qué respirar.
Siento el tiempo que dura,
con qué fuerza siento el tiempo que dura.
COMO CARROÑA
Desnuda sin piel,
denigrada como la que violan,
como la que ya
no quieren violar,
como un cadáver abofeteado,
como un agonizante al que
escupen a la cara,
como un animal vivo,
que muriendo en el matadero
pasa a ser artículo de consumo,
envilecida como una carroña
que se desprecia a sí misma,
como un excremento de carroña,
humillada
tan profundamente
como jamás podría serlo
un varón,
una mujer
sobre la camilla ginecológica
bajo la mirada
de los médicos.
ANNA ŚWIRSZCZYŃSKA, conocida también como Anna Swir, nació en Varsovia, Polonia, el 7 de febrero de 1909.
Comenzó a publicar poesía en la década de 1930.
Creó su propia forma de poesía, su propia manera de hablar del mundo, y se hizo conocida por describir sus experiencias durante la Segunda Guerra Mundial, en la que ejerció como enfermera, así como dar un enfoque feminista a temas como la maternidad, el cuerpo femenino y la sensualidad.
Fue traducida al inglés por el Premio Nobel Czeslaw Milosz, que la consideraba una de las más importantes e innovadores voces de la poesía polaca.
Murió en Cracovia, el 30 de septiembre de 1984.
Las traducciones directo del polaco fueron hechas por Bárbara Gill, Argentina 1949 de padres polacos, tiene estudios de filología polaca.
Miembra fundadora del Colegio de traductoras de literatura polaca con sede en Cracovia.
Barbara hace un comentario sobre el apellido de Anna “ yo corto su apellido en “swi”, en tanto que Milosz lo reduce a “swir”, supongo que como un chiste oculto, porque “swir” en polaco significa “chiflado”… ¡y en buenahora que Anna estuviera chiflada”
aportación por parte de nuestra colaboradora Marta Cwielong
Marta Cwielong, nació en Longchamps, Buenos Aires, Argentina. Ha publicado su obra bajo los títulos: Razones para huir. De nadie. Morada (Valencia, España). Pleno de ánimas. Las vírgenes terrestres, (Observación de poetas latinoamericanas, trabajo de investigación y creación). La orilla. Memorias del hambre, (Ediciones POE Guatemala). 2 Poetas de Argentina, publicación compartida con Mariana Vacs, Ediciones Corazón de Mango, Colombia. No esperes que me anuncie, publicación bilingüe catalán-castellano compartida con el poeta valenciano Pere Bessó. Participa en numerosas antologías y festivales de Poesía de Latinoamérica. Su poesía ha sido traducida al catalán, polaco, italiano y francés. Embajadora de La Guacha Revista Nacional de Poesía. Pertenece a la consejería editorial de la revista Revista Literaria Taller Igitur de Mexico.