
ELLA ESTÁ ALLÁ
una casa que tenga jardín
jardín que sea el mundo
un estado que sea nuestro
sólido, máximo
un estruendo tremendo
codazos barullentos
en una multitud
sin relojes
si hoy parece ayer ayer busca el mañana
en la historia
y vas a ver que la
lucha:
purulenta
femenina
popular
ella estalla
BIEN VENIDAS
primero el susto
primero destierro
primero un tono inaudible
un rayo espeso
dientes en fiesta
chocándose
primero
REFUGIADOS
sentir la plaza por los pies
discutir Tolstoi con las manos
también deseamos tierra
tierra es carne que cuanto más se reparte
más se tiene
de las nubes
ninguna palabra:
pacto de cumplicidad
TROMPA
en esa parte arrancada de mí se sienta un gato
ronronea y sé que ronronea [por qué dios es mujer
multilingüe y pixelada] a la frecuencia máxima de 30.2hz
y que a diferencia del maullido
el ronroneo produce un sonido de tono bajo
audible solo a distancias cortas
en esa parte que me arrancaron
los perros hacen fiestas
este fragmento esta cosa hueca
es pista para una mosca
que tras toda una vida dedicada a la transmutación
envejece como huésped de patógenos
como cualquiera de nosotros
en esta brecha me abrazan las esquinas
me clavan los dedos me uñan
seguros y inseguros, los días
quizás no soy la única a sentir presencia en lo ausente
instrumento desafinado retirado
lidiando con tus ruidos
Flora Miguel es periodista, trabajadora de la cultura y escritora. Posee poemas desparramados en publicaciones literarias de Brasil y Portugal. “tiempo sin cruz” es su libro de estreno y saldrá por la Editora Primata en 2022.