
CUALQUIER FINAL ES UN GOLPE SECO
Palmira está filtrada con hollín
la calina enfunda ‘La Mantellina’,
esta montaña no sabe de pestes
su dios la protege del futuro
prohibieron las colmenas en el mundo
la esquina no podrá ser un poema,
el pringue vacío
sin seres contagiosos
dos abejas trasgreden el sermón
no vale pasado de monaguillo
suben a la aguja más alta del sagrario
el peligro hiede a vino consagrado;
Los caminos viven liberando las tensiones de su lomo. Son un abismo
más corto que las enfermedades. Las piedras de la tierra no tienen
compasión con el cráneo. Cualquier final es un golpe seco.
Una cae. Dos cae. Tres lloran:
La madre.
El padre.
El pueblo.
― ¡Prohibidas las colmenas en el mundo! ―dijeron.
La marcha fúnebre quiebra el adobe de la iglesia. Las cabezas
desprotegidas se multiplican caminando hacia el cementerio. El pueblo
cuelga sus ojos en las ventanas, acompañando a los hijos al entierro.
las bocas solidarias no olvidaron el morbo. Hay detalles ilegibles
Escondidos en la urna. Lenguas babeantes de especulación tras las
puertas asustadas. La muerte quemó los oídos de ‘El Santísimo’. Nancy
vomita sesos de la aldea. El miedo escupe imprudencia en forma de
cruces.
Después el cielo volverá a escuchar,
los muertos harán un milagro
la calina se irá con la peste
ya los habrá infectado el futuro.
Inédito
VACAS
Las vacas predican quejidos,
diseñan historias eclécticas.
Enseñan más de lo que piensan:
―las palabras atadas estrangulan―.
Vomitan su propio cerebro,
el pecado pesa algunos kilos.
Rezan a un corazón en llamas,
llevan las espinas en el sexo.
Inflaman alianzas pro-vida
si huelen amenazas de aborto.
Las vacas tienen platónicos,
nunca se acuestan sin lazos.
Y aunque son rumiantes depresivos,
las vacas no se cortan las venas.
Del libro Fábula tropical – inédito
CHIGÜIRES
Los chigüires tienen malicia,
venden discursos sociales.
Son roedores transformistas,
a veces se tornan humanos.
Celebran orgias diplomáticas,
rituales parlamentarios.
Sueñan con Miss Chigüire,
banda dibuja un cargo.
Vuelan en alfombras blindadas,
temen el amor del pueblo.
Los chigüires pueden ser mutantes
si se infectan por papel verde.
El poder explota su locura,
los convierte en sanguijuelas.
Del libro Fábula tropical – inédito
CAIMANES
Los caimanes son aventureros,
se fuman su propia piel.
Han reencarnado del fuego,
arden con su sol en Leo.
Reptan en ríos negros,
para liberar deseos convictos:
Quieren germinar células freudianas,
engendrar sentimientos porno.
―Beso y aprendo otra lengua―
así excusan una adicción,
envueltos en piel humana
dispuestos a inyectarse dolor.
Los caimanes no son tan malos,
solo se hacen los rebeldes.
Del libro Fábula tropical – inédito
LUIS GLOD (San Cristóbal – Venezuela, 1994). Escritor y realizador escénico. Ha trabajado en diversas producciones teatrales como actor y director a nivel nacional e internacional. Ganador del I Premio Nacional de poesía Joven Cátedra Libre Juan Paéz Ávila (2017) con “Sobre El ojo azul”. Finalista del III Concurso Nacional de Poesía Joven Rafael Cadenas (2018). Su libro “Fábula tropical” resultó ganador del 4to Concurso de Poesía Joven Descubriendo Poetas (2019). Recientemente recibió el I Premio Nacional de Literatura Humorística Aquiles Nazoa mención dramaturgia por el texto “Camelias para Malcolm”.