MI ODIO Odio a los que para acomodarse la corbata se tardan un diciembre; a los que después de haber escrito versos de perro dolido mendigan la alabanza ajena. Odio a los que desprecian la mujer que los acosa por un sueño que nunca alcanzarán, y a los que con teología —pulcramente inexacta— se sirven de los imbéciles. Día a día, Marco Antonio Campos, vigilé tus actos. 1970 PERO EN SERIO ¿VALIÓ LA PENA? Ya no podríamos escribir como en esa época, en los años oscuros cuando creíamos...
- 12 septiembre, 2020
- 0 Comentarios