
De LA NATURALEZA VIOLENTA DE LAS COSAS (INÉDITO, 2018)
TAMBORES
Las piernas de la mujer abiertas como puertas.
El dolor repite el ritmo de un tambor de guerra
que anunciara la batalla. Ríos corren de
sangre
y fluidos florecen frágiles, inmarcesibles.
Sangre
manos-garras aferradas a la superficie
Sangre
Clavándose a fondo como lívidas raíces.
Sangre
Se rasga de a poco la piel como una promesa,
Sangre,
Como un capullo lanzando al aire sus aromas.
Sangre,
Se asoma la vida misma entre la carne viva.
Sangre
Sangre que quizá un día perpetuará la sangre.
Sangre,
Sangre,
Sangre.
De DEROGACIÓN DEL TEDIO (INÉDITO, 2019)
DUERME SERENA LA PIEDRA
bajo la marcha del río.
Apenas se siente el frío
y un rayo de sol arredra
el rocío y la verde hiedra.
Politonal alegría
de luz es la sinfonía
que intensifica el aroma:
la poesía se asoma
en el celoma del día.
REVELACIÓN TERCERA
Cien minotauras fornican
con los signos de la muerte
púrpura. Tras una fuerte
embestida se lubrican
las miradas, multiplican
los restos de la agonía.
Esta es la genealogía
del impulso creador:
DOLOR, FURIA Y ESTERTOR
que transmuta en poesía.
De SINFONÍA DE LA DISLEXIA (2020)
XVI
Cuando el alba despereza sus canoas
en esta ciudad humeante de llantos y llantas
Narcótica de mí
un tiempo de agua resuma tetragramatones
en el corazón de los equiláteros cincel
que no conoces
martilla abandonada
huérfana del filo de otros colibríes tecnocráticos
amputada del misterio que te maquilo
Jauría hambrienta de atardeceres te nombro
OTROS POEMAS
POEMA PARA SER LEÍDO EN VOZ
BAJA MIENTRAS SE ESCUCHA, DE
FONDO, CADAVER DE GERARDO ENCISO
Nuestros silencios se tornan tormenta
de dedos, voces, caricias, sudores,
uñas, olores, cabellos, sabores
que funden la vida en una violenta
danza de tendones, de huesos y sed.
Dos cuerpos en uno: baile profundo
que muy lentamente transforma el mundo
en fértil tierra de lenguas y piel
concupiscente que se enciende cuando
los sentimientos no están permitidos;
solo carne sobre carne apagando
las llamas con delirios derretidos:
como una estela que fuera lanzando
gemidos largos de animal herido.
DE CÓMO EL POETA SE REENCUENTRA CON EL MAR Y SONRÍE
I
Digo
que he venido aquí como quien vuelve a casa
después de largas ausencias.
Y digo también que el mar es un delirio,
un niño ansioso acariciando las mejillas
sonrosadas de la arena
-cariñoso vástago que se torna sangre-
en la moribunda explosión de los crepúsculos.
El mar es un delirio, digo.
Veo su calma tibia como el pecho iridiscente
de una nodriza que amamanta silenciosa al universo.
Estatua de sal que seduce el amanecer desde su entraña
como si un parto viniera a diario a reventar sus hilos,
a violentar sus azules toros de espumoso brío.
II
¿de quién es el mar?
¿A qué espejismo pertenece?
III
Un pico rompe la clara cara del agua.
Miles de sardinas danzan la danza de la huida.
El sol entreteje sus luces con las gotas que salpican las horas.
Un cangrejo abandona la angosta casa de su infancia.
Mis pies se pierden bajo los granos de la arena negra.
IV
He abierto los ojos ante tu brisa
Padre sangre
Abuelo mar
V
El mar es un corazón delirante
Sístole
D i á s t o l e
En el eterno arrullo de la contraola.
ERES QUIEN DEDUCE LOS TRES ROSTROS QUE TIENE LA ANGUSTIA.
Dueño de una patria rota
cuyos fatuos brillos titilan al compás de las migraciones.
Eres y no,
un crepitar de huesos sin nombre
rodando a ciegas por las avenidas silenciosas
de la noche.
Sombra ajena alimentando las palomas homeless de la tarde
desde que decidiste las concavidades de la paciencia
Por eso el canto es una presunción de sinsabores trágicos
que roen el caparazón de la nostalgia,
y todo se queda callado.
Luis Enrike Moscoso (Villaflores, Chiapas, México. 1984), ha participado de diversos festivales de poesía en México y Centroamérica. Ha publicado cuatro libros de poesía: Matar los Cuervos del Alma (2012), Brujulario (2013), Radiografía de un Crustáceo (2018) y Sinfonía de la Dislexia (2020). Parte de su trabajo ha sido incluido en antologías en México y Centroamérica y se ha traducido al inglés, francés y portugués. Actualmente dirige la editorial independiente Espantapájaros Editorial, en Chiapas, México y es miembro del colectivo cultural Punto de Fuga.