
ESCRITO EN PRIMERA PERSONA EN UN SOLO TIEMPO
Ah manera de comenzar estas letras, en contratiempo, contraluz y en favor tuyo. ¡Qué manera! Qué manera la que danza mi corazón al verte sumergida en tonadas al ritmo de tambores del Pacífico que me invitan a mover mis caderas, imaginando las tuyas desnudas sobre mí.
Puedo sentir como mis ojos tiemblan con un vaivén de emoción al ver tu blanca piel frente a mí, con tu blusa verde que deja al descubierto tu voluptuoso pecho, blanco y abullonado, firme y escultural.
En tu aura, una conjetura entre lo real y lo que no es, con notas al viento que como susurro sale de tu voz, una taca tá, taca tá, taca tá, que me hace sonreír y delirar, ha de ser el amor que sincroniza el taca con el tun tun de mi emancipado corazón.
He de verte como una amada inmortal, como un piano para Elisa o como un adagio de Albinoni, tu sola presencia en un vals en 3/4 en la que danzo entre una aurora que me llena de violetas y verdes enfermizos.
No me puedo mentir, por más que intento escribirte y describirte a notas en una escala ascendente de Do, lo que logro más allá de ello es que estés en mí, como la filosofía al sabio, como la mayéutica a Sócrates y tan enigmática como el desconcierto a Nietzsche; pero tan mía como Sísifo a Camus y mi amor tan arriesgado como Dante a su Beatriz, el mismo que sin reparo iría a buscarte a cualquier infierno a sabiendas que tu cuerpo es un paraíso como un cuadro de Monet y tu figura tan lujuriosa como el arte de Caravaggio.
Es verdad jamás sabré si estás en Do, quizá solo quizá estés en FA, aunque lleves el brillo de un Sol… de lo que puedo estar seguro es que a pesar de lo desafinada que esté mi alma, vos siempre estás en mí…
TINTA ORGÁSMICA
Mi piel tiene tu sello estampado en cada rincón,
soy un volcán en erupción cuando tus manos rozan inquietas por mi espalda,
y me estremezco junto con el aroma que dejan tus labios de miel cada vez que me bañas en besos cargados de pasión.
Estallo de deseo y lujuria al ver tu rostro contraído cuando hacemos el amor;
y vuelo, vuelo lejos a quimeras y lugares no descritos mientras como una nave con tus movimientos me llevas a lo alto de la inmensidad;
puedo sentir la humedad que brota de vos para empapar mis muslos de carne ardiente, sellando el momento de enfermiza pasión en un círculo de emociones que dejan en evidencia tu fragilidad y poca cordura, dándome las letras suficientes para plasmar esta tinta orgásmica.
MI POEMA
Mi poema se decanta sobre tu piel
en tus curvas bien trazadas
en un lecho que me dice a gritos que este cuerpo viejo quiere caer.
Mi poema sobresale de tu pecho para escribir versos candentes, forjando besos sobre ellos, dejándolos firmes como estas letras.
Mi poema cae al borde de tu hiel, que saboreo cuando mi lengua roza tus labios que no son tu boca, para llenarme del elixir de tu alma que evoca las más lúgubres tonadas, dejándome llenar de dulces notas que entonan la marcha de un adagio que me inspiran a escribir… mi poema.
VIAJE
Tócame, otórgame placer, un placer erótico que me haga aterrizar en vos una y otra vez.
Desnúdame, hazle el amor a mi cuerpo y a mi alma también, tanto que logre destilar letras en abundancia.
Seamos gloria y seamos pecados hasta perder todos los estribos que conducen a la razón.
Seamos sueño cargado de calor, en el cual quedemos repletos de nuestras esencias que luego podamos beber entre la suavidad de los suspiros.
Embonemos nuestras pelvis al ritmo de una danza magistral para que nuestros ombligos y pecho sean una conjunción como planetas alineados que eclipsan nuestra pasión.
Seamos todo aquello que queramos ser, dejando traspasar la locura y el arrebato para terminar encendidos en la llama de un abrazo efervescente, que una piel a piel nuestro sudor y el ritmo del palpitar… en uno solo.
TE INVITO (COMPÁS A ¾)
A escuchar melodías a ritmo de vals
y luego bailar, cerrando los ojos,
rozando nuestras mejillas.
A dejar que el tiempo se detenga
en un círculo de armonías
mientras nuestros ojos se miran
a hacer una profecía de amor
que se pacte en el firmamento
al movimiento de 1, 2,3…
A fundir nuestros cuerpos
en un simple compás que tenga inicio
Y no tenga un final…
JAVIER CIENDÚA G. Joven amante de las letras de nacionalidad colombiana, posee algunos estudios en licenciatura en educación y doctor (C) en la misma, eclipsado por el erotismo y la literatura negra policial, ha construido escritos envueltos en el misterio bajo la inspiración de las frías noches citadinas, conserva un fragmento de esperanza en la humanidad, pensando que aún se puede soñar, reír, cantar, amar… quizá así el mundo podría, por fin, empezar a vivir. Dentro de algunas de sus publicaciones se encuentra, Utopías y Desvaríos (2020). La Tormenta (2021). Cartas al deseo (2022) y se encuentra en proceso de publicación de sus novelas policiales.